Dieta BARF para gatos: alimentación natural y saludable

El tema de la dieta BARF ya salió en numerosas ocasiones dado todos los beneficios que aporta a nuestros compañeros, pero esta vez te traemos la dieta BARF para gatos, adaptada totalmente a las necesidades de los felinos (de un modo general, por supuesto, sin tener en cuenta necesidades específicas de cada rey o reina de la casa).

La dieta BARF para gatos es un enfoque que promueve una alimentación más natural para nuestros felinos. Este tipo de dieta se basa en ofrecer a los gatos alimentos crudos y frescos, imitando lo que comerían en estado salvaje.

Además de una dieta adecuada, es fundamental crear un entorno que permita a los gatos explorar su lado más salvaje de manera segura. Mantener un hogar adecuado para ellos, con espacios para escalar, rascar y jugar, puede ayudar a canalizar su energía natural sin que destruyan nuestros muebles. 

¿Qué es la dieta BARF para gatos?

La dieta BARF se fundamenta en la premisa de que los gatos son carnívoros obligados. Esto significa que su sistema digestivo está diseñado para procesar carne cruda, huesos y otros ingredientes naturales, a diferencia de los alimentos procesados que a menudo contienen aditivos y conservantes. En la dieta BARF para gatos se busca replicar la dieta natural de los gatos, lo que puede llevar a mejoras significativas en su salud y bienestar si es adaptada correctamente. De hecho, cuando repasamos los pros y los contras de esta elección nutricional, los contras vienen de una mala adaptación pues es necesario conocimientos para poder llevarla a cabo de una forma adecuada.

Beneficios de la dieta BARF para gatos

Adoptar la dieta BARF no solo se trata de ofrecer comida cruda. Implica una serie de beneficios que pueden impactar positivamente la salud y el bienestar general de tu gato. 

Al proporcionar una alimentación más acorde con sus necesidades biológicas, puedes observar cambios significativos en su energía, aspecto físico y comportamiento.

• Mejora la salud dental: La masticación de huesos crudos ayuda a reducir la acumulación de sarro y mejora la salud dental en general.
• Piel y pelaje saludables: Una dieta rica en proteínas y grasas saludables puede resultar en un pelaje más brillante y una piel más sana.
• Mayor energía y vitalidad: Los gatos alimentados con una dieta BARF suelen tener más energía y una mejor vitalidad.
• Control de peso: Al ser una dieta más rica en nutrientes y menos procesada, puede ayudar a mantener un peso saludable.
• Mejor digestión: La dieta BARF para gatos puede ser más fácil de digerir para muchos felinos, reduciendo problemas gastrointestinales como el estreñimiento o la diarrea.
• Fortalecimiento del sistema inmunológico: Los ingredientes frescos y naturales pueden fortalecer el sistema inmunológico, ayudando a tu gato a combatir enfermedades.
• Reducción de alergias alimentarias: Al eliminar los aditivos y componentes de alimentos procesados, algunos gatos pueden experimentar una disminución en las alergias alimentarias.
• Comportamiento natural: Una dieta más acorde a su instinto natural puede ayudar a reducir comportamientos destructivos o problemáticos, ya que se sienten más satisfechos y saludables.

Componentes clave de la dieta BARF

Al implementar la dieta BARF para gatos, es importante adaptar la alimentación a las características específicas de cada gato. Factores como la edad, el nivel de actividad, si está castrado o no, y cualquier problema de salud existente pueden influir en sus necesidades nutricionales. 

Así como en los humanos, la cantidad y proporciones de nutrientes deben ajustarse para garantizar que tu gato reciba lo que realmente necesita. 

Antes de hacer cambios en la dieta de tu gato, es fundamental consultar a un veterinario, especialmente si tu felino tiene condiciones de salud preexistentes. Un profesional podrá evaluar sus necesidades nutricionales específicas y ofrecerte recomendaciones personalizadas para asegurar una transición segura hacia la dieta BARF para gatos.

Además, es muy importante investigar sobre las proporciones adecuadas de carne, huesos y órganos que deben incluirse en la dieta. Un desequilibrio en estos componentes puede llevar a deficiencias nutricionales que afecten la salud de tu gato. Asegúrate de comprender bien qué alimentos son apropiados y en qué cantidades deben ser ofrecidos bien como conocer potenciales alimentos tóxicos para tu huella compañera.

La transición a la dieta BARF debe hacerse de manera gradual para evitar problemas digestivos. Comienza mezclando pequeñas cantidades de comida BARF para gato con su alimento habitual, aumentando progresivamente la proporción de la nueva dieta a medida que tu gato se adapta. Esto ayudará a que su sistema digestivo se ajuste sin causar malestar.

Finalmente, no olvides tener cuidado y mantener la higiene al manipular carne cruda. Es de vital importancia asegurarte de que los alimentos estén bien almacenados para evitar contaminaciones. Lávate las manos, utensilios y superficies después de manipular la carne, y guarda los ingredientes en el frigorífico o congelador según sea necesario para preservar su frescura y seguridad.

A continuación, exploramos los componentes clave que deben incluirse en una dieta BARF para gatos bien equilibrada y cómo personalizarlos según las necesidades individuales de tu felino.

• Carne cruda: Incluye carne de res, pollo, pavo, cordero, y más.
• Huesos carnosos: Estos huesos son esenciales para proporcionar calcio y fósforo.
• Órganos: Como hígado y riñones, que son fuentes ricas en nutrientes.
• Vegetales y frutas: Aunque los gatos son carnívoros, pequeñas cantidades de vegetales y frutas pueden ser beneficiosas.
• Suplementos: En algunos casos, es recomendable añadir suplementos de omega-3 y otros nutrientes esenciales.

Carne cruda

La carne cruda es el componente principal de la dieta BARF para gatos. Incluye una variedad de fuentes proteicas como res, pollo, pavo y cordero. 

Los gatos son carnívoros obligados, lo que significa que su sistema digestivo está diseñado para procesar proteínas de origen animal. La carne proporciona aminoácidos esenciales, como la taurina, que son vitales para la salud cardíaca, la visión y la función reproductiva. 

Además, la carne cruda contiene grasas saludables que aportan energía y ayudan a mantener una piel y un pelaje sanos. Al ofrecer una variedad de carnes, se pueden cubrir diferentes necesidades nutricionales y evitar la monotonía en su dieta.

Huesos carnosos

Los huesos carnosos son otra parte crucial de la dieta BARF para gatos. Estos huesos, que deben ser crudos y carnosos (como los cuellos de pollo o las alas), son esenciales para proporcionar calcio y fósforo, minerales vitales para la salud ósea y dental. 

La masticación de estos huesos también ayuda a mantener la salud dental de los gatos, ya que actúa como un cepillo natural que reduce la acumulación de sarro. 

Sin embargo, es fundamental evitar huesos cocidos, ya que pueden astillarse y causar lesiones internas graves que pueden requerir intervenciones quirúrgicas.

Órganos

Los órganos, como el hígado y los riñones, son fuentes ricas en nutrientes y deben formar parte de la dieta BARF para gatos. 

El hígado, en particular, es una excelente fuente de vitaminas A, D, E y K, así como de hierro y otras vitaminas del complejo B. Estos nutrientes son esenciales para el metabolismo, la función inmunológica y la producción de glóbulos rojos. 

Incorporar órganos en la dieta asegura que tu gato reciba una amplia gama de nutrientes que no se obtienen únicamente de la carne muscular.

Vegetales y frutas

Aunque los gatos son carnívoros, pequeñas cantidades de vegetales y frutas pueden ser beneficiosas. Estos alimentos pueden aportar fibra, lo que ayuda a la digestión y a la salud intestinal. 

Algunos vegetales, como la calabaza o el brócoli, pueden ser bien tolerados y ofrecer antioxidantes que apoyan el sistema inmunológico. 

Sin embargo, es importante recordar que los gatos no necesitan vegetales como parte fundamental de su dieta, por lo que deben ofrecerse en pequeñas cantidades y siempre cocidos o bien triturados para facilitar la digestión.

Suplementos

En algunos casos, puede ser recomendable añadir suplementos a la dieta BARF para gatos de modo a garantizar que se cubren todas las necesidades nutricionales. Por ejemplo, los suplementos de omega-3, derivados del aceite de pescado, son beneficiosos para la salud del corazón y la piel. 

También se pueden considerar suplementos de taurina, especialmente si la dieta carece de fuentes adecuadas. Sin embargo, es conveniente consultar con un veterinario antes de añadir cualquier suplemento, ya que un exceso de ciertos nutrientes puede ser perjudicial para el felino.

Algunos ejemplos de preparaciones BARF para gatos

Implementar una dieta BARF para gatos implica tiempo de preparación y no siempre resulta sencillo encontrar el momento para dedicar a la cocina. 

En el mercado hay algunas opciones disponibles pero es recomendable verificar siempre que estos productos cuenten con los ingredientes necesarios en buenas proporciones y que se mantenga la cadena de frío durante el transporte. Aunque los precios suelen ser más elevados, esto se justifica por la calidad de los alimentos incluidos y el tiempo de preparación, lo que puede ser conveniente si no disponemos de mucho tiempo en casa para hacerlo nosotros mismos.

Si te decides a poner manos a la obra y preparar la alimentación de tu felino, como un excelente servidor, aquí te dejamos algunas opciones.

Pollo con hígado y calabaza

Ingredientes:

• 100 g de pechuga de pollo cruda
• 30 g de hígado de pollo
• 50 g de calabaza cocida (sin condimentos)
• 1 cucharadita de aceite de pescado (suplemento de omega-3)
• 1 huevo (opcional, solo la yema)

Instrucciones:

1. Cocina la calabaza hasta que esté blanda y déjala enfriar.
2. Tritura la calabaza junto con la pechuga de pollo y el hígado en un procesador de alimentos hasta obtener una mezcla homogénea.
3. Añade el aceite de pescado y la yema de huevo, mezclando bien.
4. Sirve en el plato de tu gato, asegurándote de que la comida esté a temperatura ambiente.

Cordero con verduras

Ingredientes:

• 100 g de carne de cordero cruda
• 30 g de corazón de cordero
• 20 g de zanahoria cocida
• 20 g de espinacas cocidas

Instrucciones:

1. Cocina la zanahoria y las espinacas hasta que estén tiernas y déjalas enfriar.
2. Pica la carne de cordero y el corazón en trozos pequeños.
3. Mezcla todos los ingredientes en un bol, asegurándote de que estén bien incorporados.
4. Sirve la mezcla en un plato y ofrécele a tu gato.